Durante los últimos años hemos vivido muchos cambios a nivel laboral influenciados por la transformación digital y desconocemos con exactitud cómo va a ser el futuro del trabajo. De hecho, en un estudio realizado por Dell se prevé que el 85% de los puestos de trabajo que se desempeñarán en los próximos diez años aún no se han inventado.
Ante esta situación, son muchos los profesionales y empresas que se quedan estancados al no poder hacer frente a los cambios. En una encuesta a nivel mundial realizada por McKinsey & Company se asegura que nueve de cada diez mánager y ejecutivos ya se enfrentan a carencias en las habilidades necesarias en sus organizaciones o esperan experimentarlas en los próximos cinco años.
La oportunidad para las empresas disruptivas yace en aplicar un reskilling, es decir, promover la mejora o adquisición de nuevas habilidades para complementar las que ya poseen y un upskilling o actualización de las mismas. Ambas acciones permiten mejorar el ambiente laboral y multiplicar la competitividad de la empresa. Los profesionales, a su vez, deben apostar por la formación continua para no quedarse atrás en el mercado laboral.
¿Por qué es tan importante el reskilling y el upskilling?
Aunque el 42% de las compañías se han visto obligadas a detener el reskilling y el upskilling de sus empresas después del COVID-19 se espera que ambas actividades sean tendencia de la formación corporativa durante 2021 ya que:
Al menos el 54% de los empleados necesitarán una significativa actualización y mejora de sus habilidades para el 2022, según los resultados anunciados en The Future of Jobs Report 2018.
La necesidad de mejorar las competencias de los profesionales es inminente y así lo revela una encuesta global realizada por PWC:
El 74% de los CEO de las empresas se preocupan por la falta de habilidades de sus empleados.
Ante esta situación, el reskilling y el upskilling se convierten en dos grandes aliados para las organizaciones que quieren garantizar su supervivencia a la vez que impulsan sus resultados en un entorno laboral altamente competitivo.
Ambas acciones permiten a las empresas:
- Crear confianza.
- Promover la retención de talento.
- Hacer frente a la brecha digital.
- Atraer a los Millennials con una propuesta de evolución constante dentro de la organización.
- Facilitar los procesos de selección y el onboarding.
- Ofrecer a los empleados movilidad dentro de la empresa.
- Mejorar el desempeño de los empleados en su día a día.
- Adaptar la cultura de empresa con los cambios del entorno laboral.
- Fomentar el aprendizaje continuo.
- Aumentar la participación, motivación y productividad de los profesionales.
¿Cómo promover el reskilling y el upskilling con éxito?
Ahora que ya sabes la importancia del reskilling y upskilling, es momento de descubrir cómo puedes aplicarlos con eficacia en tu empresa en cinco sencillos pasos:
- Realiza un análisis de la situación actual de la empresa para saber hacia dónde se inclinan los nuevos puestos y necesidades.
- Toma en cuenta los resultados obtenidos para los procesos de selección, a la vez que se miden las habilidades que poseen los empleados de la empresa en ese momento. Esto permite establecer diferenciaciones sobre quiénes tienen más necesidad de realizar un proceso de reskilling o de upskilling.
- Implementa los itinerarios formativos para cada tipo de perfil. La formación online facilitará la implementación y puede fomentar el engagement si se utilizan metodologías innovadoras como la formación con videojuegos.
- Evalúa los resultados obtenidos y el feedback de los participantes.
- Continúa la investigación de forma continua para estar al día con las tendencias laborales y poder adaptar los itinerarios al porvenir de la empresa.